lunes, 5 de febrero de 2007

Orgullosos de su identidad taína*

Por Carmen Millán Pabón
Participantes del estudio genético celebran la certeza de sus orígenes precolombinos


José Seda Almodóvar se sometió voluntariamente al
estudio genético de interés antropológico, el cual lo
identificó como parte del linaje indígena A-I.

El poeta hizo la pregunta y el estudio del ADN mitocondrial de los puertorriqueños está dando las contestaciones.

José Seda Almodóvar y María de los Ángeles Giménez de Morales ya saben con certeza qué decirle a Fortunato Vizcarrondo, autor de “Y tu agüela, ¿aónde ejtá?”

Ambos son indígenas y haplogrupo A, con combinaciones adicionales que los identifica del Linaje Indígena A-I, el segundo más común en Puerto Rico, que nunca se ha encontrado en personas que no sean de ascendencia puertorriqueña.

José, de 65 años, siempre supo que tenía “la rajita” indígena. Su abuela materna poseía una “mata de pelo lacio y negro” que lo hechizaba cada vez que se soltaba el moño.

“Tenía también la nariz y los pómulos sobresalientes, los llamados ‘dientes de pala’ y la piel cobriza”, dijo evocando recuerdos de la niñez que ahora ata a los resultados de las pruebas genéticas de interés antropológico que se hizo de forma voluntaria.

Esas pruebas se han estado haciendo extrayendo células de la raíz del pelo o de tejido bucal.
“Uno se siente bien. Fue gracioso, porque los que no salieron indígenas no salieron contentos”, añadió riéndose.

Orgullosa de confirmar sus orígenes precolombinos, la pintora Giménez de Morales, se emocionó de manera indescriptible y dijo “entender” muchas de las sensaciones de identidad taína que había tenido a través de toda su vida.

“Mis hijos se pusieron contentísimos. Cuando llegaron los resultados los tuve que leer tres veces”, dijo emocionada.

La mujer, de 66 años y residente en Estados Unidos, siempre estuvo atraída a lecturas sobre temas taínos, que traducía en pinturas y trabajos. “Desde pequeñita mi mamá me hacía historias de los indios y cuando comencé a pintar, pintaba indios”, recordó con entusiasmo.

Al enterarse de que dos investigadores trabajaban en la identificación del ADN mitocondrial indígena, los contactó y se sometió voluntariamente al estudio.

“Me habían dicho que tengo ‘dientes de pala’, una característica indígena, pero otra cosa es saber que tenía genes indígenas y del linaje indígena A-I, que nunca se ha encontrado en personas que no sean de ascendencia puertorriqueña”, dijo más que feliz la admiradora de piezas taínas, que ahora se pregunta si fueron creadas por alguna de sus antepasadas directas.

*Source: El Nuevo Dia